ATENCIÓN

Muchas de mis críticas revelan partes importantes de la trama de las películas. Aconsejo mirarlas antes de leerlas o atenerse a las consecuencias.
Mediante este aviso el autor se desliga de toda demanda civil y penal de la que se lo pudiera acusar.
(PD: No soy de los que dicen: ¡Bruce Willis Esta Muerto!!!)

jueves, 7 de febrero de 2008

La Antena (o Apostando a las ideas)

Hoy me senté a ver una película Argentina y tuve la sensación que no era Argentina. Y esto no es por menospreciar el cine Argentino, que nos ha dado grandes e importantes películas. Es hacer foco en algo que no se ve comunmente en estas tierras: la osadía, el animarse a más, el salir de lo preestablecido, de perderle el miedo a lo que la gente dirá. Es jugarsela por una idea, con creatividad, mucha creatividad, con talento, con prolijidad, con ambición, con muchos de los elementos que Esteban Sapir, director de "La Antena" sabe manejar y que son algo que ya nos mostró en su opera prima "Picado Fino".

Una película blanco y negro. Ambientada en una epoca retro-futurista. Una ciudad sin Voz. Un malvado llamado Sr. TV que planea robarle a la ciudad también las palabras, mediante un dispositivo que utlizando una de las unicas voces y trasmitiendolo, duerme a la ciudad y les roba las palabras que tienen. Un hombre Rata, un ser con un monitor en su boca. Un chico sin ojos (no ciego) que tiene voz. Especies extrañas cohabitando en unos escenarios de caracterisitcas netamente de principios del cine. Con texto para leer. Palabras impresas que son las palabras de los protagonistas, pero que a la vez interactuan en la acción. Una banda sonora sublime que hace lo suyo dentro de esta pieza de relojería que es "La Antena".
Es un guión que bien podría calificarse de "ciencia ficción". Que bien podría tener puntos en comun con peliculas como "Dark City". Donde lo estético roza una perfección abrumadora, que durante el transcurso de la película lo transporta a uno a otro lugar.

















Es la apuesta contante a una idea. Puede gustar (Muchisimo en mi caso) Puede no gustar. Pero nadie puede decir que Sapir no puso todo. Que se zambulló de cabeza tras una idea. Que un director sigua esa idea, y mantenga la fuerte convicción para hacer algo en lo que uno cree, es lo que me dice que tenemos tela para cortar en el cine Argentino. Mientras tengamos más "Sapires" dando vueltas. Mientras nos animemos a salir. Mientras nos permitamos volar y nos dejemos llevar por esas ideas que nos toman la cabeza. Porque acá las podemos hacer. Se puede. Sapir lo demostró. Y esperemos lo siga demostrando. Porque yo, como los habitantes de la ciudad, por un momento, me he quedado sin palabras.

Samaritan Girl (Samaria)


Kim Ki Duk. Ya nombrarlo nos hace pensar. Una película de Kim Ki Duk, es siempre una película de Kim Ki Duk.
Cuando se habla de "Cine de Autor" hay muchos ejemplos que nos vienen a la cabeza (Citemos los clásicos: Hitchocock, Welles, Burton, etc...); pero no debemos olvidar a este impecable director coreano. Con 48 años en su mochila, Kim (es lindo llamarlo como si fuera un amigo) ha logrado establecer una línea sobre lo que le gusta decir. Una coherencia demoledora lo hace hablar una y otra vez de un tema nada sencillo: las relaciones interpersonales. Y si bien la semilla es la misma, el molde es distinto en cada entrega.

"Primavera, Otoño, Invierno, Verano y otra vez Primavera" (pongamos el titulo completo, que para algo Kim la llamó así!!!), "El Arco", "Hierro 3", "El Tiempo"(sus obras mas comentadas) y esta "Samaritan Girl" se alinean bajo la misma premisa. Explorar a fondo, casi desde adentro las relaciones entre personas, de distinto sexo, del mismo, familiares, amigos, conocidos o desconocidos. Todo un universo de sensaciones revolviéndose en cada vínculo.
Todas estas envueltas bajo una sublime puesta en escena, con una elección de locaciones mágica y con todo el condimento audiovisual que el cine Oriental nos tiene afortunadamente acostumbrados.

Y así nace "Samaritan Girl". Una hermosa película que nos habla de la relación entre dos amigas, una relación que por momentos parece exceder la "simple" amistad y se deja entrever una relación de amor. Nos habla de una relación de padre e hija, cuando una madre falta. Nos habla de lo difícil de estas relaciones, de lo tortuoso que se puede convertir este lazo con otro.
Personajes tan bien delineados que pierden la línea. Historias tan retorcidas que ganan credibilidad. Belleza dentro de lo terrible. Y todo esto sin ser lo más minimamente explícito.
Una película que toca el tema de la prostitución, donde las escenas de sexo están pero no se ven. Y uno las siente. Un suicidio fuera de campo, sin siquiera ver el momento del salto. Solo el suelo. Un ruido y un líquido espeso que corre por la vereda.












Así es Kim, contando a partir de detalles construye la trama. Solo sabemos lo que es necesario. Los personajes hablan cuando lo tienen que hacer, no para explicar nada. Las metáforas inundan la pantalla y lo dejan a uno sin palabras, quizás sin entender de que me "habla". Pero que al final, uno de alguna manera entendió que fue lo que pasó.
Ejemplo a mi gusto encantador de esto, es la lección final de manejo del padre a la hija. Es un modo de decir: "de ahora en adelante vas a seguir sola, aprendé a manejarte". Y vemos como el padre se aleja en el auto de la policía y ella intenta alanzarlo, pero no sabe controlar bien el auto y termina encajada. Para mí, es maravilloso y tristemente trágico el final de esa película. Ese auto encajado nos habla mucho más allá del barro y un vehículo que no puede avanzar más. Pero estas interpretaciones son netamente mías, y no pido las compartan.
















También recuerdo casi con "extraña-emoción" esa especie de 'sueño' que se ve hacia el final de la película. Que por momentos parece ser un sueño de ella, pero que a mi modesto entender es una de las salidas que ve el padre, una salida a ese dolor que no puede superar. Excelentemente filmado en cámara lenta nos hace sentir que matarla es lo único que puede poner final ´feliz´a esta historia. Pero el padre toma otra elección, que a mi entender no queda muy lejana de este final ´soñado´.
Y así es "Samaritan Girl" una película hermosa que nos muestra el dolor, la belleza, el ser humano, como en una gran radiografía, casi perfecta. Que nos deja flotando en el medio de algo que no sabemos bien que es. Una especie de abandono, pero que por algo no nos hundimos, por algo seguimos a flote. Es una maravillosa historia del hipnotizante "Universo Kim Ki Duk"